
Couchsurfing es
la solución más viable para poder obtener un alojamiento totalmente gratis,
debido a que su comunidad como tal es muy amplia y por ende a través de ella se
puede conseguir un lugar donde poder dormir en casi cualquier parte del mundo y
de una manera segura, esta red de alojamientos gratuitos fue la primera en
existir en todo el mundo, la cual fue fundada en el año 2004.
Esta red de
alojamientos gratuitos consta en buscar a alguien que te de hospedaje en el
lugar a donde vas a viajar, dicho alojamiento puede ofrecerte un sofá, un
colchón o un espacio donde poder armar una tienda de campaña o si tienes suerte
pueden ofrecerte un habitación privada.
Lo que debes
hacer en Couchsurfing es muy sencillo, debes crear un perfil y escribir
de manera muy personal los mensajes que vas a enviar por nada del mundo hagas
copia y pega de mensajes que veas, trata de leer muy bien los perfiles del host
y enviarle mensajes (solicitudes) a las personas que resulten ser parecidas a
ti en el sentido de lo que te gusta y haces.
Trata de subir muchas imágenes de ti, de los viajes que has hecho
anteriormente, si ya has estado alojado gratuitamente por la red de Couchsurfing
sube fotos de ti junto a las personas que te alojaron esto te dará cierta reputación
y tendrás mas ventajas de conseguir un alojamiento gratuito más rápido.
Otra cosa que te dará algo de reputación en esta red es contar
todo lo posible sobre ti, ya que esto ayudará a otras personas a tener una idea
de ti y así nomseras un simple desconocido para ellos.
Antes que todo debes ser muy sociable, ya que estas personas
prestan un lugar de su casa para poder aprender de otras culturas, por eso
cocina de vez en cuando para que haya ese intercambio de conocimientos, de
cultura, por ejemplo puedes cocinar algunos platos típicos de tu país, y por
nada del mundo seas tímido, habla mucho con ellos, pregunta sobre algunas
cosas, habla de tu vida, del viaje, entre otras cosas y ten siempre en cuentan
que debes respetar las reglas que te pongan los dueños de la casa.
No abuses de la confianza quedándote todo el día en la casa, sal a
conocer, a visitar sitios turísticos y en una de esas salidas puedes invitar a
los dueños de la casa para que se tomen algo juntos, platiquen, se conozcan
más, no necesariamente compartir dentro de la casa.